La contaminación en las aguas ocasionada por las actividades del hombre, constituye uno de los problemas de mayor trascendencia en nuestros tiempos. Una de estas es la utilización de detergentes domésticos, los cuales se hallan entre los contaminantes de naturaleza orgánica de gran magnitud a nivel mundial. Sus efectos pueden no ser inmediatamente evidentes, pero resultan devastadores a largo plazo. Los detergentes contienen sustancias para limpiar que se disuelven en agua, la cual va a parar como residuos en los ríos, lagos y océanos, causando daños en las especies acuáticas y alterando su ecosistema, pero también, se infiltran bajo la tierra contaminándola, provocando un proceso de eutrofización, que dificulta la potabilización del agua para el consumo humano. Una buena forma de reducir el impacto del ser humano en el planeta es haciendo nuestros propios productos de limpieza, además de contribuir con el medio ambiente, también obtenemos un beneficio económico. Evitar su consumo y prepararlos en casa es muy sencillo, ya que para la mayoría, solo debes utilizar ingredientes que ya tienes en la despensa, así, podrás limpiar cualquier superficie de tu casa naturalmente, sin tóxicos y gastando menos.
A continuación te compartimos unas recetas fáciles y con ingredientes naturales, para que prepares tus propios productos de limpieza ecológicos.
Limpiador multiusos: Mezcla vinagre blanco y agua a partes iguales en una botella con spray y añade unas gotas de aceite esencial de limón. Puedes utilizarlo en cualquier espacio de tu hogar. Detergente para baños: Utiliza una taza de bicarbonato de sodio y una de vinagre blanco. Primero esparce el bicarbonato dejándolo actuar por una hora. Luego vierte el vinagre y déjalo reposar 5 minutos. Talla con un cepillo y retira la mezcla con agua o un trapo húmedo. Limpiador para muebles: Mezclando 2 tazas de agua, 1/4 taza de vinagre de manzana y 2 cucharaditas de aceite de oliva, colocadas en un atomizador, podrás limpiar tus muebles rociando y secando con un paño. Quita cochambre: Crea una pasta espesa con agua tibia y bicarbonato de sodio, luego aplícala sobre la superficie del horno y déjala secar por 2 horas. Después solo límpiala con un trapo humedecido con agua tibia. Desinfectante: En un frasco de vidrio coloca limones cortados en rodajas y agrégales vinagre. Déjalo reposar por 3 o 4 semanas y utilízalo mezclándolo con agua en las mismas cantidades.
Aromatizante natural: En 1 litro de agua hierve 1 limón en rodajas, vainilla y 1 rama de romero u hojas de eucalipto. Una vez frío, cuela y colócalo en una botella con atomizador. Rocíalo y disfruta de un aroma refrescante. Evitar los productos con ingredientes derivados del petróleo es muy importante, ya que presentan una mayor incompatibilidad con el medio ambiente, su degradación es muy lenta, causan alergias, irritaciones, e incluso compiten con los organismos vivos por el consumo de oxígeno, por ello, remplazarlos por una opción más ecológica es una de las mejores formas que tenemos para ayudar con la conservación de nuestros ecosistemas.
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